Es muy importante que tu seguro de salud se adapte a tus necesidades particulares y garantizar las coberturas de consulta, hospitalización y servicios de diagnóstico.
Una de las opciones que tienes es la del copago, o lo que es lo mismo, el abono de un porcentaje de cada servicio utilizado. Esto, dependiendo de tus circunstancias, puede hacerte ahorrar mucho dinero. Sucede lo mismo con la opción de franquicia: una cantidad pactada, que deberás abonar por las técnicas sanitarias que definas en la póliza.
Nuestros mediadores expertos analizarán todas las variables para recomendarte la opción que mejor le siente a tu salud y a tu bolsillo.